Las clases de saxo se imparten desde el punto de vista del saxofón moderno. ¿Qué quiere decir esto? Que usaremos recursos del saxo clásico (técnica sobre todo, y también obras) pero el enfoque principal es el de la música moderna: sonido, repertorio, estilos, concepción musical...
Son clases muy flexibles, se imparten con soprano o alto, y se adaptan al interés y el nivel del alumno/a: desde personas que quieren un primer contacto con el saxo a músicos avanzados que buscan un enfoque distinto con el instrumento o adentrarse en estilos concretos.
En principio, se dividen en tres partes:
-Técnica: Sonido, Posición, Respiración, Digitación, Afinacion, etc. (Para trabajar este área usaremos fundamentalmente los métodos clásicos: Klose, Londeix, Miján, etc.)
-Armonía aplicada-Rudimentos de improvisación: Este apartado combina el estudio de la armonía con su aplicación a la flauta travesera, con el aprendizaje de recursos para improvisar: escalas, arpegios, patrones, solos...
(Usaremos diversos métodos modernos: Patterns for Jazz, Aebersold, Bergonzi, etc.)
-Obras: Aquí, se trabajará la interpretación de obras, temas, standards, composiciones, etc. Nos apoyaremos en los estilos que interesen más al alumno y que permitan la aplicación de lo aprendido en las otras áreas: Jazz, Flamenco, Brasil, Popular, Folk, Étnica...
Las clases se adaptan al nivel del alumno (básico-intermedio-avanzado) y en función de éste se incide más en una u otra área. Éste método de aprendizaje es muy sólido, eficaz y divertido, pues es eminentemente práctico. La idea es simple: aprender y disfrutar tocando